CAPÍTULO 199 – EL DESAMOR

Cada persona tiene su propio modo de pensar para interpretar el mundo que le rodea y tratar de manejarse en él, del mejor modo posible. Generalmente, todos buscamos sentirnos bien con nosotros mismos y los demás y lograr las metas y objetivos que nos proponemos en nuestras vidas.

Moderadores: Panoramix, biomana

Responder
User avatar
Francisco de Sales
Habitual
Habitual
Mensajes: 360
Registrado: Mar May 15, 2012 6:19 pm

CAPÍTULO 199 – EL DESAMOR

Mensaje por Francisco de Sales »

CAPÍTULO 199 – EL DESAMOR
-CONCEPTOS-

Este es el capítulo 199 de un total de 200 –que se irán publicando-  que forman parte del libro RELACIONES DE PAREJA: TODO LO QUE NO NOS HAN ENSEÑADO Y CONVIENE SABER.

No todas las relaciones que comienzan con un amor más o menos consolidado y con buena voluntad acaban bien. Diferentes factores pueden intervenir para malograr el proyecto. La ilusión no es suficiente, el deseo no es suficiente, ni siquiera el amor es suficiente. Todos somos personas diferentes y cada uno lleva encima su historia y sus propias circunstancias, y esto se añade a los múltiples elementos externos.

Por otra parte hay que asumir que, en la vida, todas las relaciones con otras personas y con las cosas tienen un comienzo y tienen un final. Algunas relaciones acaban con la muerte de uno de los miembros y otras acaban en cualquier momento. Y hay que aceptarlo así aunque no sea del agrado de uno y sea lo opuesto a los deseos.

El desamor viene como una posibilidad junto con el amor, y las muestras de desamor en la relación son notables. La más evidente es la confirmación verbal de ello, pero se nota en la desatención, en la falta de muestras de cariño, en el desprecio velado, en el tratamiento distante, o en la falta de comunicación o de pasión.

Cuando uno nota desamor es conveniente que se lo manifieste claramente al otro y que no se quede callado esperando que al otro se le pase lo que sea que le esté sucediendo o que sea algo que se resolverá solo.

Si siente el desamor, que no busque posibles razonamientos o motivos imaginarios a quienes achacárselo. Que no comience a culpabilizarse sin antes hablar. Que manifieste del modo apropiado sus sentimientos, lo que está notando y cómo se está sintiendo. Y que pregunte al otro cuáles son sus sentimientos en el modo que considere adecuado, pero directamente. Y a partir de ahí es cuando se tomarán las medidas que se consideren pertinentes.

Contra el desamor ajeno no se puede hacer nada si no existe el deseo libre del otro y su participación. Sabemos que no se puede obligar a nadie a amar ya que los sentimientos se rigen por sí mismos y no obedecen a intereses ni a órdenes mentales. Con el desamor de uno hacia su pareja… es necesario un reconocimiento sincero de los sentimientos, saber qué ha pasado para llegar a eso, qué está pasando, cuánto interés hay por resolverlo, cuántas ganas y cuánto amor se tiene… y la vista de las respuestas tomar la decisión deseada. Y hablar con el otro.

Es en esa conversación, en la que se comprobará el interés de ambos por continuar o no y de qué manera, donde se decidirá qué hacer o no con la situación y si se va a poner en marcha un plan de revitalización o no, y donde se tomará una decisión que será, imprescindiblemente, consensuada.

Si se confirma el desamor y que no hay intención de intentar recuperar el amor que hubo, es mejor asumirlo resignadamente y tratar de no hacer un drama de ello. Buscar la mejor solución a todos los conflictos que eso va a acarrear, deshacer la relación del mejor y más amable modo posible, entender que no es un asunto personal de falta de validez de uno de ellos sino que se trata de que no encajan juntos como pareja, cuidarse mucho ambos durante el proceso, y darse permiso y libertad para iniciar otra relación con otra persona más adecuada.

Lo que es favorable para ambos es que el desamor se quede en desamor, que eso es lo que es, y que no se convierta en odio. Por respeto a la emocionalidad de ambos y por el amor que antes se tuvieron, es preferible que no se instale una antipatía cruel y despiadada hacia el otro. El odio es innecesario.

SUGERENCIAS PARA ESTE CASO:

- Es favorable para ambos que el desamor se quede en desamor, que eso es lo que es, y que no se convierta en odio.
- Contra el desamor ajeno no se puede hacer nada si no existe el deseo libre del otro y su participación en reconvertirlo en amor nuevamente.
- En la mayoría de las ocasiones el desamor es irreversible, por eso es conveniente el cuidado de la relación para que no llegue a suceder.


Francisco de Sales


Si le ha gustado este artículo ayúdeme a difundirlo compartiéndolo. Gracias.
Responder



Usuarios navegando por este Foro: Google [Bot] y 13 invitados